domingo, 17 de abril de 2016

La pesca del siluro al clonk.



La pesca al clonk para mí ha sido la modalidad que más siluros me ha dado, ya que con esta técnica no era raro capturar hasta 8 ejemplares por día. Digo era, porque basándome en los resultados que llevo este año, pienso que es una técnica de la que el pez se “resabia” rápidamente, ya que el ruido del clonk es lo bastante característico y se abusa tanto de él, que no es difícil que el pez lo asocie rápidamente a dolor. Esta explicación es sencilla, el siluro es atraído por ese ruido y acto seguido ataca nuestro señuelo, es normal que al “pincharse” alguna vez o incluso varias, estos peces empiecen a desconfiar.

Ojo con esto no digo que este sea el principal motivo de la reducción de capturas este año, también está siendo más frio que el anterior y muy inestable en cuanto a clima, todos sabemos cómo afectan estos cambios a la pesca en general.

 Es curioso como este año ya eh clavado varios siluros al lance en aguas que no eh tenido éxito con el clonk, y lo que realmente me mosquea es que por instinto siguen apareciendo en la pantalla de la sonda a mi llamada, pero al ver los señuelos no los atacan o los atacan muy tímidamente. También quiero ser optimista  y estoy convencido de que cuando suba la temperatura del agua unos cuantos grados más, pasen las frezas etc. Mejorará la situación y se conseguirán más ejemplares.

Volviendo al tema. Para la pesca al clonk se podría decir que es indispensable una sonda, sea mejor o peor. Sinceramente una sonda básica es suficiente para obtener resultados, no es como la pesca al lance que hay que buscar estructuras sumergidas, bancos de peces pasto, cortados etc… Solo con que se vean los vinilos y quizá una pantalla a color para ver la cercanía del siluro a nuestro señuelo con más claridad, tenemos mucho ganado.

Para empezar sería suficiente la elite 3-X de Lowrance, muy buena relación calidad-precio, pantalla a color y una durabilidad increíble de batería.
Obviamente también es necesario un clonk, en este caso es muy aconsejable tener uno relativamente bueno, en mi caso llevo uno metálico y estoy muy contento con él. Ya que variando la fuerza con la que golpeo cambia el sonido, lo que es muy importante si pescamos diferentes profundidades.
También decir que el clonk no es cogerlo la primera vez, darle y que suene a las mil maravillas, tiene su cosilla, es un ejemplo muy claro de: “más vale maña que fuerza”.

En cuanto a la técnica de esta modalidad, se basa en la localización de “puntos calientes”, estos se encuentran con la ayuda del clonk más que con la de sonda. En la mayor parte del año me centro en buscar reculas, ya que en estas normalmente hay más actividad de toda especie de pez, animando a los siluros a ir a buscar allí sus presas, y si a esto le añadimos un cambio brusco de la profundidad en los alrededores, esta zona se vuelve aún más fructífera. Estas variaciones de profundidad le viene muy bien al siluro, ya que la mayor parte del tiempo esta apostado en las profundidades, hasta que detecta una presa y una vez la descubre simplemente sube ataca y vuelve a las profundidades pasando así desapercibido.
Este comportamiento se aprecia muy bien en la sonda, ya que al hacer actuar el clonk la gran mayoría de los siluros aparecen desde el fondo y van subiendo a los señuelos, los atacan y si fallan vuelven a las profundidades.

Siluro dudando con un señuelo.
Estos cortados cercanos a reculas serian mis preferidos, aunque también las paredes de piedra con gran profundidad dan muy buenos resultados, sobre todo en verano. Si no conocemos sitios o vamos de nuevas a una zona de pesca, lo mejor es variar de zonas. Yo lo hago de la siguiente manera: llego a una zona y le empiezo a dar al clonk y si en unos 10,15 minutos apenas aparecen siluros, cambio de sitio y así sucesivamente hasta que doy con ellos. Obviamente esto es relativo, un día puede estar sin señales de vida la zona y al siguiente haces la jornada de tu vida, pero normalmente en los puntos calientes hay peces, aunque otra cosa es que caigan engañados. Una vez que se ha dedicado tiempo pescando la misma zona, se acaba yendo directo a los puntos calientes y aunque no se vean de primeras los siluros sabemos que están hay e insistiendo una y otra vez acabas haciéndolos salir.
En cuanto a los señuelos, yo les suelo dar movimiento continuado para que estos sean localizados más fácilmente con un simple balanceo del kayak o tironcitos del hilo e incluso les añado algún aroma.

Cuando vemos que un siluro sube hacia el señuelo sin vacilar, lo mejor es ya tener la caña en mano y mover el señuelo alrededor del kayak, así no nos pilla por sorpresa la picada en el cañero, esto lo recomiendo porque un par de veces he tenido una picada tan bestial, que no podía sacar la caña del cañero, perdiendo así un tiempo muy valioso o la captura en sí.

También recomiendo una vez clavado el siluro, con paciencia y cuidado recoger la otra caña, si es que la tenemos echada, para así evitar que se lie una line con otra, complicando la captura.
También es bueno apuntar que el siluro esta rendido cuando este empieza a echar burbujas, aunque aún le queda una o dos últimas arrancadas al llegar a la superficie o tocarlo, es muy útil darle una palmadita en la cabeza para ver si aún le quedan fuerzas, si después de la palmadita sigue inmóvil ya podemos asegurar la captura y orillarla para las fotos.
Siluro listo para encordar.
                                        

sábado, 12 de marzo de 2016

Señuelos para la pesca del siluro. Parte 2 (Señuelos duros).



En esta nueva entrada, escribiré sobre otro grupo de señuelos artificiales. En este caso sobre los señuelos que clasifico como duros y sus variedades, que van desde: crankbaits, a jerkbaits, lipless, swimbaits, paseantes, cucharillas ondulantes, etc…
                                        
Estos señuelos normalmente los uso para pescar a curricán, aunque algunos de ellos como los lipless o swimbaits a veces los pongo para pescar en vertical.

La principal ventaja que tiene sobre los señuelos blandos es la durabilidad. También, se podría decir que tienen más poder atrayente, esto es debido sobre todo a las bolas internas que llevan algunos modelos, emitiendo gracias a estas muchas vibraciones y ruidos. También ayuda mucho las diversas formas de los baberos (el que los lleve) que les dan infinidad de movimientos, dependiendo de la forma que le hayan dado, variando así la profundidad que alcanzan, el “baile” que tengan, etc…

Para mí las desventajas son: normalmente un precio bastante superior a los vinilos y que los que lleven baberos están muy limitados para pescar a gran profundidad. Por ejemplo, en cuanto a modelos con babero el que más profundidad me baja son 11 metros que está bastante bien, aunque hay que llevarlos con mucha línea suelta (alejados de la embarcación) para que bajen con más facilidad. Aparte ejercen mucha resistencia al recogerlos, de hecho, si los recoges desde un lateral te acaban girando el kayak.

Por último voy a diferenciar un poco mas los tipos de señuelos duros que más uso:

  • Crankbaits: este grupo es el que más me gusta personalmente en cuanto a imitaciones de peces. A parte de su babero, suelen tener formas redondeadas y bolas internas. Esto les hace emitir mucho ruido y vibraciones. 
                                          
  • Jerkbaits: son muy similares a los crankbaits, se diferencian sobre todo en la forma, mucho más alargada y cercana a los peces, lo que provoca unos movimientos de zigzag muy reales.
                                          
  • Lipless: este grupo de “sonajeros” carecen de babero y suelen llevar la anilla o anillas en la parte superior del cuerpo. Gracias a la opción multianillas se pueden presentar más inclinados o menos dependiendo donde lo ates. Están rellenos de bolitas metálicas que llaman la atención de los depredadores aun en las profundidades. A parte su forma plana también le da un movimiento muy eléctrico y llamativo.
                                        
  • Swimbaits: en este grupo los hay con babero y sin babero. Estos señuelos tienen el cuerpo dividido en segmentos unidos por anillas, esto le hace tener una movilidad tremendamente realista.
                                            
  • Especialidades para siluro: en este grupo voy a meter las grandes cucharillas ondulantes, muy usadas también para lucio y los conocidos pulpos de madcat. Estos últimos, mis preferidos de todos los señuelos para siluro, tienen un efecto espectacular bajo el agua y se ven estupendamente en la sonda aun a grandes profundidades, para mí el señuelo de aguas frías por excelencia.
                                          
                                          

miércoles, 2 de marzo de 2016

La pesca al currican desde kayak.



Esta entrada iba a tratar sobre los señuelos duros y el curricán, pero viendo lo extenso del artículo he decidido separarlo en 2 partes: Los señuelos duros y la pesca al curricán. Por tanto, en la entrada de hoy trataré el segundo aspecto.
                                 
Esta modalidad la suelo poner en práctica mientras voy de un puesto a otro o simplemente que me apetece pescar esta técnica ese día, ya que para mí, esta forma de pesca es la más relajante y con la cual disfruto más de los paisajes extremeños. La verdad que da grandes sorpresas. Es una pesca más intrigante que el clonk, ya que de esta forma puede entrar un siluro, una lucioperca, un bass, un lucio e incluso barbos. Es decir,  es una técnica que abarca gran diversidad de especies de cualquier especie y tamaño.
                                                     
El curricán es una técnica idónea para empezar en el mundillo de la pesca desde kayak,  ya que apenas  hace falta material, de hecho, ni siquiera sonda. Únicamente hay que dejarse guiar por lo que te dice el terreno. Por ejemplo, al ver una lengua de tierra adentrándose hacia el agua es lógico que nos abramos para evitar enganches, también hay que conocer bien qué señuelos llevamos y cuánto profundizan. Si pescamos en arenales ayuda mucho dejar que toquen fondo, esto atrae muchísimo a los depredadores; por el contrario, si pescamos zonas rocosas o con vegetación hay que tener más cuidado.
                                                      
Hay que reconocer que es una técnica fácil, muy recomendada para niños y principiantes en la pesca. Obviamente, hay épocas mejores que otras para tener garantías de captura, normalmente es en primavera cuando los depredadores se acercan a las orillas. También tiene pequeñas variaciones en las capturas, dependiendo de la forma y el ritmo en el que nos movamos. Por ejemplo: los siluros los he cogido a muy poca velocidad, incluso parando unos instantes. Y en cambio a mayor velocidad, con señuelos pequeños y zigzagueando he tenido mejores resultados en basses y barbos. En cuanto a luciopercas normalmente las he cogido con señuelos de gran profundidad y colores llamativos.

Es aconsejable llevar un “perrillo”, este se elabora fácilmente con unos trozos de cadena fina, un mosquetón, una anilla y tantos metros de cuerda como profundidad pesquemos, esto salva la mayoría de enganches en rocas. Su funcionamiento es simple, se pasa la línea de pesca por el mosquetón y perfectamente vertical al enganche se dejan caer el perrillo hacia el señuelo. Una vez abajo, jugamos con ambas cuerdas (línea de pesca y cuerda del perrillo) y así las cadenas acabaran enganchándose en algún anzuelo de nuestro señuelo, pudiendo así, en la mayoría de los casos, alzarlo de nuevo a nuestra mano.